El
director de Ryanair, Michael O’Leary, entra en un Pub y pide una
Guiness.«Un euro», le dice el camarero.«¡Qué barato!», piensa para sus adentros
mientras deja la moneda encima de la barra.
-Perdón,
pero si no ha traído su propio vaso son dos euros más», le advierte el
dependiente.
O’Leary
saca refunfuñando las monedas, coge la jarra y se encamina hacia una de las
mesasdel local cuando la voz le interrumpe de nuevo:
-Si se va a sentar, tendrá
que añadir un extra de tres euros y, como no ha reservado asiento, deberá pagar
otros dos euros más.
El
ejecutivo irlandés, muy mosqueado, se acerca al dependiente y le espeta:
-¡Esto
es un abuso!, quiero hablar con el responsable del Pub.
El camarero le sonríe:
-Sólo puede contactar por correo electrónico.
-Por cierto,
si no va a lavar el vaso son dos euros más.Y, por favor, recójalo todo antes de
marcharse».
No hay comentarios:
Publicar un comentario